Que internet se ha convertido en un canal de desarrollo de negocios y en un soporte básico e imprescindible para las estrategias de comunicación y publicidad ya lo hemos comentado en varias ocasiones. La cuestión es si realmente lo sabemos utilizar de la forma adecuada o si, por el contrario, cometemos más errores de los que nos creemos.
Parece una misión sencilla, pero la verdad es que es necesario prestarle una atención especial para conseguir todos los objetivos y ser realmente competitivos.
Pasos de una estrategia de comunicación online.
Para desarrollar una estrategia de comunicación online y que sea efectiva, es importante analizar todos los elementos que aparecen en la estrategia y que están al alcance de nuestro público y posibles futuros clientes. Y como en todo, hay que evitar empezar la casa por el tejado.
Primero de todo, cuidaremos nuestra imagen desde el interior de nuestra empresa vigilando de forma exhaustiva la imagen de nuestra página web y cuidando con detalle la opinión que nuestros trabajadores tienen de la empresa. Este último punto es importante pues los comentarios que ellos transmiten sobre la empresa hacia el exterior y que publican en sus redes sociales son un escaparate muy significativo para el resto del público.
Por su parte, nuestra página web es nuestra tarjeta de presentación. Por este motivo, tiene que tener una buena presencia y ser de fácil navegación.
Los contenidos tienen que estar correctamente distribuidos, que los enlaces no estén erróneos y que el usuario pueda encontrar fácilmente lo que busca.
Además, tenemos que facilitar nuestros datos de contacto para que el usuario pueda contactar con nosotros en caso de querer ampliar la información o realizar alguna consulta sobre nuestros servicios.
Cuando hablamos de estrategia de comunicación online, la mayoría de personas lo relaciona rápidamente con las redes sociales, pero no hay que olvidar nunca mantener nuestra página web en óptimas condiciones.
Una vez cuidado este aspecto, ya podemos dedicar nuestros esfuerzos a las redes sociales. Aquí es importante priorizar calidad frente a cantidad.
Publicar de forma masiva material que no aporte interés a la audiencia o spam, generará una reacción negativa y contraria a lo que posiblemente estemos buscando. De este modo, tenemos que cuidar nuestras publicaciones y mensajes, manteniendo una imagen actualizada y ofreciendo información que realmente interese al usuario.
Además de mantener una presencia activa en las redes, es importante solucionar las dudas de los usuarios, contestar a las peticiones y atender de forma cordial aquellos comentarios no tan amables como nos gustaría.
Más allá de las redes sociales en nuestra estrategia de comunicación online.
Hay que resaltar también que, cuando hablamos de internet, no son sólo las redes sociales.
Asimismo, podemos utilizar otras páginas webs, blogs o foros para darnos a conocer y, de la misma manera, debemos controlar las menciones que hablen de nosotros en el resto de rincones de internet, ya que podemos encontrar tanto críticas como alabanzas y es importante mantener todos los comentarios bajo control.
Analizar cada mensaje publicado, números de visitas, comentarios, likes o retweets, por ejemplo, permiten adivinar cuáles son los intereses del público y el nivel de interacción con nuestras publicaciones. Esto nos ayudará a tomar acciones, mejorar la estrategia inicial y optimizar el tiempo, lo que nos hará alcanzar los objetivos de forma eficaz.
Conociendo nuestro público objetivo y sin olvidar el medio que estamos utilizando en nuestra estrategia de comunicación online, utilizaremos un tipo de lenguaje adecuado para la ocasión.
Según el sector de nuestra marca o empresa, el mensaje que queremos transmitir y el público al cual nos dirigimos podemos darnos la libertad de utilizar un lenguaje más cercano, coloquial y amistoso que en otras ocasiones.
Esto generará proximidad y confianza, lo que ayudará a crear interés y/o fidelizar al lector que en ese momento consulte nuestro mensaje. Esto no quiere decir que tengamos que obviar la corrección ortográfica, gramatical y sintáctica (que en todos los casos, sin excepción, debe ser la correcta).
Una vez tengamos estos puntos resueltos, nuestra misión será mejorar nuestro SEO y trabajar el SEM para darnos a conocer y que nuestra página web así como nuestras redes sociales, obtengan el tráfico deseado y se conviertan en herramientas de comunicación recíprocas entre los usuarios y nuestra empresa. Estos puntos los analizaremos con más detalle en nuestros siguientes posts.